简体中文
繁體中文
English
Pусский
日本語
ภาษาไทย
Tiếng Việt
Bahasa Indonesia
Español
हिन्दी
Filippiiniläinen
Français
Deutsch
Português
Türkçe
한국어
العربية
Extracto:Una serie de presentaciones de la SEC de anoche desvelan que Elon Musk vendió alrededor de 4.400 millones de dólares
Una serie de presentaciones de la SEC de anoche desvelan que Elon Musk vendió alrededor de 4.400 millones de dólares en acciones de Tesla (NASDAQ:TSLA) esta semana, cuando llegó a un acuerdo con la junta directiva de Twitter (NYSE:TWTR) para comprar la compañía por 44.000 millones.
“El éxito de la oferta por Twitter podría preocupar a los accionistas de Tesla, ya que su consejero delegado se vería envuelto en otro proyecto de gran envergadura y podría vender parte de su participación del 9,1%, que está valorada en más de 90.000 millones de dólares”, advertía Ben Laidler, estratega de mercados globales de eToro.
Cuando Elon Musk presentó la financiación de su oferta para comprar Twitter, prometió aportar 21.000 millones de dólares en efectivo.
“La mayor parte de su riqueza está ligada a las acciones de Tesla, y una de las formas más obvias de recaudar el dinero sería vender algunas de esas acciones”, advertía The New York Times.
Para calmar los ánimos, Musk ha tuiteado esta madrugada que no se planea más ventas de acciones de Tesla.
Quizá este mensaje ha podido servir, ya que el valor sube en preapertura de este viernes de Wall Street tras el cierre en negativo de ayer.
A finales del año pasado, Musk vendió alrededor de 15,8 millones de acciones de Tesla, por un valor aproximado de 16.000 millones de dólares, al vender el 10% de su participación en la empresa de vehículos eléctricos para ayudar a pagar una factura fiscal de 11.000 millones de dólares, recuerda MarketWatch.
Las acciones de Tesla han bajado un 18% en lo que va del año, pero en los últimos meses suben un 26%.
Descargo de responsabilidad:
Las opiniones de este artículo solo representan las opiniones personales del autor y no constituyen un consejo de inversión para esta plataforma. Esta plataforma no garantiza la precisión, integridad y actualidad de la información del artículo, ni es responsable de ninguna pérdida causada por el uso o la confianza en la información del artículo.
El oro se mantiene en niveles históricamente altos, superando los USD 3 400 por onza al 10 de agosto de 2025, impulsado por la incertidumbre económica global y tensiones comerciales. América Latina, gran productora del metal, tiene la oportunidad de capitalizar estos precios mediante minería formal y reservas estratégicas, aunque enfrenta el serio desafío de la minería ilegal que drena recursos y alimenta redes criminales. El reto está en transformar esta riqueza en desarrollo sostenible y estabilidad financiera para la región.
Hoy, 10 de agosto de 2025, el dólar muestra debilidad tras datos laborales flojos en EE.UU. y crecientes apuestas a que la Reserva Federal recorte tasas en septiembre. Esto ha impulsado a varias monedas latinoamericanas —como el peso mexicano, el real brasileño y el peso chileno— que se benefician de un contexto externo más favorable. La región, según la CEPAL, crecerá un 2,2 % este año, aunque con grandes diferencias entre países y persistentes retos estructurales. En el trading global, además del dólar, destacan el euro, la libra esterlina, el yen japonés y el peso mexicano como divisas clave para las operaciones diarias.
Los aranceles anunciados por Donald Trump a inicios de año ya son oficiales, y con ellos ha vuelto el nerviosismo a las bolsas de todo el mundo. Las caídas en Wall Street y Europa reflejan el temor a una desaceleración económica real, justo cuando EE. UU. reporta un débil crecimiento del empleo. Las empresas enfrentan mayores costes y los inversores están ajustando sus carteras en busca de refugio. Este nuevo episodio de proteccionismo no solo afecta al comercio: pone a prueba la confianza global en un momento económico delicado.
El dólar sigue marcando el ritmo de la economía latinoamericana. Su fortaleza actual, impulsada por tasas de interés altas en EE. UU. y la búsqueda global de refugio, está afectando a monedas como el peso argentino, el real brasileño y el peso colombiano. Mientras algunos países como Argentina intentan reformarse para atraer inversiones, otros enfrentan presiones inflacionarias y menor crecimiento. En este contexto volátil, entender el papel del dólar y las divisas más operadas es clave para anticipar los movimientos que marcarán el futuro económico de la región.